jueves, 15 de septiembre de 2016


La metalmecánica argentina se destaca por su importancia estratégica debido a la cantidad de puestos de trabajo que genera.
Cada millón de dólares exportado en maquinaria agrícola y agropartes equivale a 60 puestos de trabajo directo e indirecto. Por este motivo, los especialistas del INTA destacan la importancia estratégica del sector e incentivan la competitividad con actividades como el 15.º Curso internacional de agricultura de precisión, el 28 y 29 de septiembre en el INTA Manfredi, Córdoba.
De acuerdo con Mario Bragachini –coordinador del programa “Procesos tecnológicos para agregar valor en origen en forma sustentable” del INTA Manfredi, Córdoba–, “las nuevas reglas que rigen las exportaciones agropecuarias mejoraron la rentabilidad del trigo, maíz, soja y algunos cultivos regionales. Esto, a su vez, impulsa una mayor demanda local de máquinas y agropartes de agricultura de precisión”.
“En consecuencia, las inversiones en el mercado local de máquinas agrícolas ascenderán, para finales de este año, a más de 1.650 millones de dólares, un 14 % más respecto al año pasado. Entre estas se desatacan las sembradoras ”, puntualizó el técnico del INTA.
En referencia al impacto social de este incremento, Bragachini destacó su “importancia estratégica” y detalló que “nuestro país actualmente exporta más del 20 % de la facturación local, lo que equivale a 12 mil puestos de trabajo directos e indirectos”.
Y aseguró que “se trabaja fuerte para incentivar la competitividad de este sector en el mercado global y local” ya que se estima que por cada millón de dólares exportado como maquinaria agrícola se generan 60 puestos de trabajo.
En línea con el informe del INDEC, la venta de máquinas agrícolas en el país durante el segundo trimestre de 2016 alcanzó una facturación de 4.281,6 millones de pesos, lo que representa, en relación al mismo trimestre de 2015, un aumento del 76,8 %. Los tractores y cosechadoras presentan los niveles de facturación más altos del trimestre con 1.672,4 y 1.039,4 millones de pesos, respectivamente.
En cuanto a las ventas, el informe indica que las sembradoras y tractores presentan incrementos de 111,5 % y 100 %, respectivamente, mientras que las cosechadoras registraron una suba de un 60,4 % y los implementos aumentaron un 47,8 %.
Argentina, hacia el mundo
“El mercado de máquinas agrícolas está en pleno crecimiento en materia de demanda de tecnología y calidad”, aseguró Bragachini quien detalló que la Argentina es el segundo país del mundo en adopción de agricultura de precisión, después de Estados Unidos, y el primero de Latinoamérica en desarrollo, fabricación y adopción.
Existen más de 20 empresas nacionales de escala internacional que producen electrónica y software para transformar a las máquinas agrícolas argentinas en inteligentes, autoguiadas, autoregulables e híper conectadas. “Esto nos permite adquirir competitividad global para satisfacer la exigente demanda del mercado interno y externo”, indicó Bragachini.
Entre los principales destinos, el especialista destacó Bolivia, Uruguay, Sudáfrica, Kazakstán, Venezuela, Brasil, Italia, Rusia, Paraguay, Ucrania, Guatemala, Australia, Estados Unidos, México, Perú, Chile, Mozambique, Namibia y Rumania.
Por una producción más precisa
Reunidos en el 15.º Curso internacional de agricultura de precisión y máquinas precisas, el 28 y 29 de septiembre en el INTA Manfredi, Córdoba, más de 30 especialistas de todo el país participarán de este espacio de actualización técnica.
Así, los interesados en conocer las novedades del sector metalmecánico y las principales innovaciones tecnológicas en automatismo y robótica podrán asistir al encuentro que estará dividido en 3 auditorios de capacitación. Además, habrá una muestra y dinámicas a campo.
El curso está dirigido principalmente a productores, asesores, contratistas y empresarios del sector y cuenta con un programa intensivo en el que se abordarán los principales ejes de la agricultura y ganadería de precisión, como así también del agregado de valor en origen.
Fuente: INTA

lunes, 26 de enero de 2015

Un INTA dañado, lejos del productor (Nota 1)

Fuente: La Nación Campo
Autor: Ernesto F. Viglizzo (*)

A moneda constante, en los últimos 10 años el gobierno nacional incrementó en no menos del 150 % el presupuesto del INTA. Eso fue motivo de orgullo y jactancia para las autoridades nacionales. La cifra sumaría en la última década más de 1600 millones de dólares, cantidad que se justificaría de haber mediado
una revolución tecnológica de grandes dimensiones. Pero eso no ocurrió. Los grandes saltos tecnológicos del agro argentino entraron de la mano del sector
privado, nos guste o no. El INTA acompañó el proceso, pero no lo lideró.
¿Por qué el INTA perdió protagonismo tecnológico? Muchos no coincidirán con mi interpretación de los hechos, pero 27 años consecutivos de permanencia en el INTA me dan cierta ventaja a la hora opinar.
Tal vez por complicidad, complacencia u omisión, en esta última década el INTA se alineó a un gobierno empecinado en librar un pernicioso combate político e ideológico contra el sector más productivo de la economía argentina, el agropecuario. El enfrentamiento, estéril e innecesario, alejó al productor del INTA.
La usina de conocimientos está dañada. El núcleo duro de investigación y extensión ha cedido terreno a una estrategia comunicacional omnipresente que difunde más actos de funcionarios políticos que tecnología. Se han gastado millones para financiar un proyecto marketinero de vuelo corto. INTA Expone es el símbolo de ese “show business”, impecablemente organizado, que se replica a través del país y que convoca a contingentes variopintos de niños y jóvenes de escuelas y colegios, docentes, habitantes del peri-urbano, residentes urbanos, políticos en campaña, técnicos de la propia institución y militantes rentados. Pero hay un gran ausente… el productor rural. No participa porque lo que allí se ofrece no le sirve. Prefiere otras “expo” con mayor impacto tecnológico, productivo y comercial ¿Cómo justifican las autoridades esta ausencia? Con un argumento simplista: el “nuevo INTA privilegia a otros actores sociales de la Argentina y no al ruralismo tradicional”.
Este cambio de roles acarreó otras cosas: el número de empleados casi se triplicó desde el 2007. Una multitud de nuevos agentes se apretujan hoy en los edificios centrales y regionales, y saturan los canales burocráticos de la institución. Muchos de ellos son jóvenes que no están preparados para atender las consultas técnicas del sector. Otros son militantes rentados del modelo que ingresaron al INTA para “ocupar posiciones estratégicas destinada a formar los cuadros dirigenciales que delinearán las futuras políticas públicas para el sector rural ¿Capacitación técnica… o simple adoctrinamiento ideológico? Algo huele mal en este asunto.
¿Cómo se ha gestionado el INTA durante estos años? Designados siempre por el gobierno nacional, algunos presidentes y vices han pasado desapercibidos; pero otros encontraron allí un trampolín hacia aventuras políticas mayores (embajadas, congreso, ministerios, gobernaciones, intendencias). La dirección nacional, o gerencia general, es la otra parte de la historia. Después de un ciclo prometedor durante la primera etapa K que sentó las bases de una estrategia institucional abierta y bien estructurada, el sistema desbarrancó. Las cosas empeoraron y derivaron en un sistema autoritario que arbitrariamente canceló programas nacionales, ignoró concursos legítimos, debilitó la investigación, devaluó al complejo Castelar, y cerró vías internas de diálogo y debate antes abiertas. Se borró una estrategia y se la reemplazó con nada. La burocracia completó el cuadro y devoró el presupuesto: cientos de viajes y reuniones tan innecesarias como improductivas desmadraron el sistema. Los técnicos, que deberían cubrir la demanda tecnológica, gastan cientos de horas de trabajo discutiendo proyectos de ejecución incierta, llenando formularios o redactando
informes que nadie lee.
Pero no todo está perdido. Sobreviven en el INTA islotes de excelencia en investigación y transferencia tecnológica que pivotan alrededor de personalidades prestigiosas y sostienen el perfil tecnológico de la institución. Sobre esos cimientos se tendrá que reconstruir la institución, aspecto que trataremos en la segunda parte de esta nota.

(*) El autor fue técnico investigador del INTA

lunes, 24 de marzo de 2014

Programa en Mejoramiento Genético y Gestión de Empresas de Semillas


Características Diferenciales 
El Programa incorpora los aportes de la visión biotecnológica, la productiva, la estratégica y la de negocios de manera interdisciplinaria. El cuerpo docente lidera programas de maestría en genética vegetal y en agronegocios y conjuga la formación académica y la experiencia práctica de los negocios. 

Ejes Temáticos 
Biotecnología. Actualización de conceptos de genética 
- Introducir a los conceptos básicos de las leyes de la herencia tanto para caracteres cualitativos como cuantitativos. 
- Diferenciar los aspectos metodológicos según los caracteres de interés que se incorporen a un programa de mejora. 
- Comprender la importancia de la variabilidad genética para obtener un exitoso programa de mejora. 

La Biotecnología y su utilidad en los programas de mejora 
- Introducir a los nuevos conceptos que aporta la genética molecular y la biotecnología 
como apoyo a los programas de mejora. 
- Discutir los cambios que estas metodologías producen en los sistemas de producción 

Gestión comercial en empresas de semillas 
- Introducir a los aspectos comerciales de las semillas e insumos agropecuarios. 
- Conocer los procesos comerciales de las organizaciones en sus aspectos estratégicos, operativos y relacionales. 
- Desarrollar las distintas etapas que conducen a la elaboración de un Plan de Marketing.

Innovación. La innovación biotecnológica y la industria de semillas 
- Identificar y comprender la dinámica de funcionamiento de las distintas etapas que hacen 
al desarrollo y puesta en el mercado de un nuevo producto en el mercado de semillas. 
- Aplicar los conocimientos adquiridos de biotecnología y negocios a un proyecto de base 
biotecnológica. 

Metodología de Aprendizaje 
La metodología integra clases magistrales, trabajo en equipo y análisis y resolución de 
casos concluyendo con el desarrollo de un proyecto integrado de negocios de base biotecnológica. 

Duración : 8 meses 
Dictado : Viernes de 14:30 a 20:30 h y sábados de 9:00 a 13:00 h 
Frecuencia : Quincenal 
Inicio : 23 de Mayo de 2014 
Sede : Facultad de Ciencias Empresariales, Universidad Austral , Paraguay 1950, Rosario 
Es un emprendimiento promocionado por ASA- PROSAP
Informes e inscripción: 
Facultad de Ciencias Empresariales, Universidad Austral. 
Paraguay 1950, Rosario. 
Pablo Gil 
Cel.: (0341) 155623812 
e-mail: pgil@austral.edu.ar

lunes, 10 de febrero de 2014

Máquinas 2020: Lo que se viene en mecanización

El especialista Mario Bragachini trazó un escenario de las tendencias de mecanización. Los principales cambios que se vienen para las máquinas en los próximos años.
Fuente: MAQUINAC
Más allá de la coyuntura, que genera preocupación e incertidumbre, las fábricas de maquinaria siguen trabajando para desarrollar nuevos productos que respondan a las necesidades productivas. En ese sentido, el ingeniero Mario Bragachini, especialista del INTA Manfredi, analizó el mercado y la tendencia de la mecanización agrícola de alta y baja complejidad en Argentina y en el mundo al 2020.
En ese sentido, señaló que Argentina es el segundo país de fabricación y adopción de herramientas de Agricultura de Precisión (AP) a nivel global; 63 empresas fabrican e importan/ensamblan o importan en un 100% herramientas de AP y venden en el mercado argentino.
Si bien es difícil predecir lo que pasará en 2020, Bragachini señaló que las máquinas autopropulsadas, tractores, pulverizadoras y cosechadoras de todo tipo serán casi robotizadas. “En 10 años, muchas podrán trabajar por el campo sin conductor en el volante, y si existiese una persona en el lote, habrá varias máquinas trabajando y uno controlando, igual que lo que hace hoy un operario de una fábrica de maquinaria agrícola de última generación, muchas máquinas automatizadas y pocas personas controlando desde un lugar o bien desde una plataforma web específica”, puntualizó.
Por otra parte, destacó que “la telefonía celular tendrá mucho más protagonismo que hoy, serán computadoras móviles de mucha capacidad y cuando los técnicos y productores analicen un lote sacarán fotos y la enviarán instantáneamente a una plataforma web para que se produzca el diagnóstico en forma automática fundamentado por los conocimientos de muchos especialistas contenidos en un software inteligente”.

Máquinas inteligentes

El desarrollo de sensores, actuadores con software potentes y TICs será explosivo. La maquinaria agrícola del futuro será un robot muy inteligente y extremadamente preciso y amigable con los usuarios, según las proyecciones del especialista. En ese sentido, comentó que ya se venden en Estados Unidos cosechadoras y tolvas autodescargables para que trabajen sin conductor conectadas por radiocontrol con el operario de la cosechadora.
En Japón, las cosechadoras robot ya son una realidad. En Europa se ven 2 ó 3 tractores trabajando juntos y uno solo conducido, al tiempo que los otros replican las operaciones por radio control.
“Las máquinas del futuro serán un 100% con una gran dotación de inteligencia electrónica, en su gran mayoría tendrán mucha más información cargada para resolver problemas en tiempo real que requieren regulación automática, que la información del operario más avezado y capacitado, hoy en la industria un centro de mecanizado asistido por robot es superior a cualquier operario industrial y eso también será posible realizarlo en el campo argentino con máquinas agrícolas del 2020”, afirmó el especialista.

Cosechadoras

Cosechadora Claas Lexion 780En tanto, las cosechadoras seguirán creciendo en tamaño, equipamiento electrónico, potencia, ancho de labor y capacidad de tolva. “Al aumentar el ancho de pisada aparece el problema para trasladarla en una ruta nacional o provincial. Por ello, será normal el equipamiento con neumáticos duales que se puedan colocar y quitar fácilmente para lograr el ancho de traslado reglamentario”, estimó.
También sostuvo que las máquinas de grupos 8, 9 o 10 -sobre todo estas dos últimas- deberán contar con algún sistema de orugas de caucho, para que queden bien sustentadas y con un ancho trasladable sobre camión. Las orugas de caucho evolucionaron en sus prestaciones y reducirán su costo siendo más competitivas.
Los cabezales seguirán aumentando su ancho y ya se sabe la fecha en que no se producirán más cabezales con sinfín para trigo, soja y sorgo. El sinfín en los cabezales sojeros ya tiene la partida de defunción y será reemplazado por lonas. Ya hay cabezales Draper comerciales de 45 pies de corte y se están probando experimentalmente de hasta 60 pies, pero también se plantea cómo trasladarlos porque su carro de traslado carece de radio de giro. Al ser tan largos los carros, tendrán complicaciones para entrar en los campos y en las rutas.
Los cabezales sojeros serán Draper en un 100% y la barra de corte flexible flotante. Para maíz aparecerán los cabezales que cosechan sin exigencia de distancia entre hilera, es decir que trabajen indistintamente a 35, 42, 52, 70 y 76 cm entre líneas y a 30 o 90 grados respecto a la siembra sin ningún problema. Esto será un punto importante porque la tendencia es sembrar el maíz a la misma distancia de la soja sin modificar la sembradora. El distanciamiento a 35 y 42 cm es muy bueno para soja y se va a querer sembrar maíz y soja con la misma sembradora neumática. La siembra de maíz a menor distancia permite un 10 a 15% más de plantas por hectárea y esto, en ciertas condiciones, puede significar  más rendimiento.

Más livianas

Hacia 2018 /20, Bragachini aseguró que habrá cosechadoras que constructivamente utilicen nuevos materiales, más livianos y resistentes (aleaciones como ser chapas microaleadas). Inclusive van a aparecer bioplásticos, algunos biodegradables en los cobertores y cabinas.
“Las cosechadoras estarán más preparadas para trabajar de noche con iluminación LED. También  contarán con equipamiento de control de incendio automático, cámaras, sensores de temperatura y disparo de extinguidores automáticos” expresó.
Asimismo, señaló que el sistema de trilla axial va a seguir sacando ventajas sobre los otros sistemas y el automatismo de regulación va a ser fundamental.
Las cosechadoras conectadas a una plataforma web va a ser una constante y también muchas tendrán un sensor Nirs de proteína y aceite en la noria para poder segregar calidad de grano por ambiente (nicho de mercado), todo pensando en que ese grano será transformado en origen y requiere de una gestión y control de calidad.
También aparecerán nuevos sistemas de barra de corte para aumentar la velocidad de avance. Los motores trabajarán con mayor proporción de biodiesel, -menor consumo específico y menor polución. “Argentina tendrá que entrar en las normas internacionales de polución porque serán exigencias de trazabilidad en la comercialización internacional de alimentos (certificación de procesos)”, afirmó.
Por su parte, los acoplados tolva del futuro serán más livianos, chapas microaleadas, de mayor capacidad de carga y con mejor sistema de rodados, la descarga será con menor tiempo y en todos los casos tendrán balanzas inteligentes, muchas de ellas conectadas a la web on line.

Sembradoras

“Argentina debe globalizar el diseño de sembradoras, de lo contrario puede perder mercado, inclusive a nivel interno. De todos modos será difícil mantener 70 fábricas. En ningún país del mundo existen tantas fábricas para un mismo producto y eso atenta contra la competitividad”, opinó el técnico del INTA Manfredi.
La principal tendencia será una sola boca de carga de semilla y fertilizante y eso estará asociado a un sistema de conducción de semilla y/o fertilizante por aire; esto se asocia a sembradoras Air Drill, con mayor autonomía y más fácil reabastecimiento.
La gran revolución estará en los actuadores que mueven los trenes cinemáticos, mecánicos e hidráulicos, que serán reemplazados por actuadores eléctricos. Con ello se van a eliminar por completo las mangueras y cadenas en las sembradoras. Con actuadores eléctricos, la  siembra y fertilización variable y el corte por sección se resuelve con software y un cable Can Bus.

jueves, 9 de enero de 2014

SEGUN INTA MANFREDI: En Argentina una de cada cuatro Has. se trabaja con dosis variable

Fuente INTA : http://inta.gob.ar/documentos/en-argentina-una-de-cada-4-hectareas-se-trabaja-con-dosis-variable/

Es evidente que el avance de la agricultura de precisión en Argentina es motorizada por INTA y lógicamente acompañada por las empresas proveedoras y el mercado.

Aqui algunas consideraciones al respecto.


Según el trabajo de INTA Manfredi arriba citado, en nuestro país 1 de cada 4 Has se trabaja en dosis variable. No explica detalladamente, ya que es un trabajo de divulgación, cómo llega a esta estimación. No dudamos del importantísimo avance que significa la aplicación precisa de insumos, y reconocemos el gran trabajo de la gente de INTA en el desarrollo, capacitación y difusión de estas tecnologías. Sin embargo para quienes día a día recorremos el ancho y largo país parece poco realista esta afirmación. No vemos esta proporción de máquinas de dosis variable. Aún suponiendo que estas máquinas, por ser nuevas y pertenecer a empresas de punta tengan un uso mucho más intensivo que las máquinas de dosis fija, es difícil creer que el 25% del área agrícola se esté trabajando con dosis variable.
También se afirma que el 100% de las máquinas que se vendan a partir de 2018 serán de dosis variable. Tampoco comprendemos cómo llega a esta afirmación tan optimista. Ojalá se cumplan estas estimaciones.
Más allá del porcentaje actual cubierto por el sistema y del año en que todas las máquinas sean de dosis variable en nuestro país, una cosa es segura, el INTA tendrá mucho que ver con ese logro.
Felicitaciones por el trabajo realizado y pedimos el apoyo de todo el agro Argentino a esta institución clave en nuestro desarrollo.

jueves, 5 de diciembre de 2013

Se jubiló Cristiano Casini, prócer del INTA

Un cálido saludo al Ing. Agr.  Crisitiano Casini. Un sabor agridulce nos deja esta noticia. Agrio, porque será difícil reemplazar su trabajo cotidiano en INTA y en el campo argentino. Dulce, porque es merecido su descanso, o tal vez su cambio de ritmo, porque dudo que un laburante como él se retire por completo. Los trabajadores del conocimiento, no tienen vencimiento y seguro que Crisitiano seguirá aportando su experiencia, su conocimiento y su inteligencia. Además como todo grande ha sabido dejar gente joven formada que seguirá su posta. Dejamos una Nota de la revista MaquiNac.

Se jubiló Cristiano Casini, prócer del silobolsa

Cristiano CasiniEl viernes 30 de noviembre fue su último día en el INTA, desde donde realizó aportes trascendentes a la difusión de la tecnología de almacenaje en silobolsa en Argentina y el exterior. Ahora, será asesor privado y docente de una maestría.
Después de casi cuatro décadas en el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el ingeniero Cristiano Casini se jubiló. El viernes 29 de noviembre fue su último día en la institución desde la cual realizó importantes aportes a la actividad agropecuaria, especialmente en lo referido tecnologías aplicadas a la poscosecha de granos. De hecho fue uno de los máximos impulsores del almacenaje en silobolsa, un desarrollo argentino que hoy gana adeptos en todo el mundo.

Trayectoria

En diálogo con MaquiNAC, durante su primer día como “jubilado”, Casini comentó que estuvo 39 años vinculado con el INTA. Egresado de la Facultad de Agronomía de la Universidad Católica de Córdoba, en 1974 ingresó a través de un programa del Ministerio de Agricultura durante siete meses; luego estuvo un año en la actividad privada, en un campo de 10.000 hectáreas en Santiago del Estero y en 1975 ingresó al INTA Manfredi a cargo de la Producción de Semillas de la EEA Manfredi con el desarrollo de la Cooperativa Mancosem Ltda. de Productores de Semilla INTA. En 1980 se incorporó a la planta permanente de la institución.
Cursó estudios de posgrado en Mississipi State University  (Estados Unidos), donde se tituló como Máster of Science (MSc) y Doctor of Philosophy (PhD) en Ciencias Agrarias, con la Especialidad en Tecnología de Semillas, Genética y Mejoramiento Genético.

 Logros

Casini, Cristiano (INTA-Manfredi) - 2003Merecedor de numerosos premios y reconocimiento a lo largo de su extensa carrera profesional, Casini se destacó, entre otros temas, por sus aportes a la producción de semillas, el agregado de valor en origen  y, fundamentalmente, la eficiencia en poscosecha de granos. En este último rubro, fue uno de los principales difusores del almacenaje en silobolsa, una tecnología de la cual Argentina marcha a la vanguardia a nivel mundial, entre otras cosas, por los aportes de Casini.
También realizó importantes aportes en materias como producción de maní, calidad en semillas y agregado de valor en origen, un proyecto encarado junto al ingeniero Mario Bragachini, que forma parte del Plan Estratégico Agroalimentario y Agroindustrial (PEA) que impulsa el gobierno nacional.
Inicialmente, Casini se concentró en tecnología de semillas, impulsando proyectos de investigación sobre la materia para difundir la importancia del uso de semillas de alta calidad. También desplegó una amplia acción en temas referidos al almacenamiento de cereales y oleaginosas, con la mira puesta en reducir las pérdidas durante esa etapa.
Trabajó en el cultivo de maní, desarrollando la nueva tecnología de cosecha y postcosecha para adaptarla al maní tipo confitería. Caracterizó la calidad del maní Argentino por sus cualidades químicas y nutricionales. En los últimos años en el INTA se dedicó al desarrollo de Pymes para incentivar el agregado de valor en origen a los granos y al fortalecimiento de las exportaciones de maquinaria agrícola al exterior.
A su vez, el reconocido profesional ocupó cargos importantes en distintas instituciones vinculadas a la actividad agropecuaria, como CONASE e INASE.
“Es un orgullo terminar mi actividad oficial en una institución tan importante como el INTA, una institución rentable y que siempre trabajó para realizar aportes a la actividad agropecuaria”, concluyó.

Asesor y docente

Casini se despidió de su cargo en el INTA, pero continuará en actividad asesorando a empresas, especialmente enfocado en lo que se refiere al comercio exterior de maquinaria agrícola. También pondrá foco en la actividad académica, ya que estará a cargo de la Maestría de Tecnología en Semillas de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).

lunes, 11 de noviembre de 2013

La Gauchada, un Valor del campo Argentino.

      En el imaginario argentino, la gauchada está instalada. En el “campo” como sector económico y social tiene muy desarrollado el hábito de hacer y pedir favores. Basta recorrer un poco la geografía nacional, adentrarse en los caminos chicos, acercarse a la gente de campo para ver hasta qué punto es esto real. Pero hay que convivir y trabajar en el campo para entender este grado de compromiso.
Un chacarero, se va de de viaje y le llega un tractor a su campo que no arranca y llama a su vecino para que se lo descargue, de tiro, tarea compleja y que puede llevar tranquilamente unas horas. Otro, contratista es requerido por un vecino para que le ayude a vaciar un acoplado a pala porque se rompió el cilindro hidráulico. Ejemplos hay miles, cotidianos y frecuentes, de gente que se enfrenta a problemas diversos en ambientes hostiles, sin los medios adecuados, pero que con la ayuda de vecinos, amigos o simples transeúntes resuelven estas situaciones. Existen muchas historias de gente de la ciudad, que se sorprende al verse inmerso en una situación fuera de su zona  habitual, en el campo, al romperse su auto o empantanarse y nunca falta un “gaucho” deja todo lo que está haciendo para echarle una mano.
No se trata de simples colaboraciones como las del vecino que nos pide una tasa de azúcar, son muchas veces tareas difíciles, tediosas, que insumen tiempo, esfuerzo y muchas veces hasta peligrosas. Nada tienen que ver con el famoso “no te metás”. Aquí se trata justamente de lo contrario: de meterse. De embarrarse, engrasarse y transpirar. Dejar lo mío, que estoy haciendo y es importante para ayudar a otro, porque es así. Porque sé que yo también necesito o puedo necesitar ayuda y este u otro gaucho me va a tender una mano. Es un valor que no genera productividad, más bien muchas veces la reduce, porque desenfoca, improvisa, interrumpe. A veces al comedido hasta le salen mal las cosas y genera complicaciones y daños con su improvisada acción. Nada de esto suele importar.

Este valor argentino de la gauchada es fruto del trabajo difícil en medios duros, que genera la convicción que hay que ayudar, porque también hay que pedir ayuda. Porque no somos autosuficientes, somos limitados y necesitados también. Está en nuestra naturaleza porque también somos improvisados. Es cierto también que valoramos a los héroes más que a la organización. Este Valor no aumenta la productividad pero seguro que genera calidad de vida. Esa calidad que la gente de la ciudad muchas veces extraña.